Hasta Vallibona, Ares del Maestrat o Todolella es muy dificil que lleguen autobuses de 55 plazas, menos camiones, y menos aún camiones articulados. El denominador común en todos los pueblos es que las carreteras que acceden hasta sus cascos urbanos son muy estrechas pero, además, una vez el vehículo en el pueblo, es muy difícil o casi imposible que pueda dar la vuelga para regresar a su punto de origen. Esta deficiencia evita que puedan acceder autobuses de 55 plazas con turistas o bien puedan llegar hasta estos municipios vehículos de grandes dimensiones como máquinas quitanieve.
Por este motivo los ayuntamientos de Ares del Maestrat y Todolella han planteado a la conselleria de Infraestructuras la construcción de un espacio para que puedan girar los vehículos de grandes dimensiones. En Ares del Maestrat cuando nieva la máquina quitanieve se ve obligada a girar en la plaza del pueblo. Y lo hace si no hay veículos aparcados, porque si los hay los problemas son mayúsculos. Hasta Ares únicamente llega una carretera que sirve de entrada y salida para el municipio. Cada mañana, el autobús que traslada los niños hasta el colegio de Benassal debe dar la vuelta en la plaza y, pese a ser un mini bús, con poco más de viente plazas, también se las ve y desea si hay algún coche más de la cuenta aparcado. El autobús de línea que comunica Vilafranca con Benassal acostumbra a parar en el Coll, a un kilómetro y medio del pueblo, ya que si tiene que ascender hasta el casco urbano emplearía más de un cuarto de hora en recorrer kilómetro y medio para luego tratar de girar en la plaza. Se da la circunstancia que, hasta Ares del Maestrat, llegan numerosos colegios dentro de las visitas que organiza la Fundació Caixa Castelló o también el proyecto Ares: Poble Escola. Los alumnos suelen llegar en autobús para participar en talleres de elaboración de queso o bien visitar la nevera medieval. Cada vez que lleva un mastodonte con ruedas las calles se quedan minúsculas.
En Todolella los vehículos de grandes dimensiones no pueden dar la vuelta en ningún punto de la travesía de la localidad. El problema no es tan grave como en Ares ya que se puede continuar hacia Olocau del Rey, aunque esta carretera es poco aconsejable para vehículos de grandes dimensiones.
El director general de Infraestructuras, Vicente Dómine, ya ha visitado ambos municipios para comprobar el lugar donde se ubicará la “rotonda” o punto de giro. Ares y Todolella han sido pioneros en plantear el problema, pero se está estudiando si hay más municipios del interior en la misma situación. Portell, la Pobla de Benifassà, Castell de Cabres o la Serra d’En Galceran son sólo algunos ejemplos.
En Ares el punto de giro se ubicará en el acceso a la localidad. En la Todolella en la salida hacia Olocau del Rey. Otro municipio que precisa de una mejora en la carretera para que puedan llegar autobuses es Vallibona. Si bien hace más de diez años se arregló un tramo del vial que comunica el municipio con Torremiró lo cierto es que una parte de la carretera continúa no siendo apta para autobuses. Su mal estado también condiciona el paso de camiones quitanieve cuando llega el invierno. Pese a que los conductores de estos vehículos ya están acostumbrados, lo cierto es que las dificultades con nieve y hielo, sumadas a un trazado estrecho y sinuoso, son más que considerables. Además, en el mismo casco urbano es ciertamente complicado que pueda girar un autobús de 55 plazas