El incendio se produce en la urbanización de Cap Blanc, donde faltan numerosos servicios. Un ciclista alertó al 112 del incendio en la vivienda, donde vivían dos adultos con dos niños
La suerte se puso ayer del lado de los ocupantes de una vivienda de la urbanización Cap Blanc de Peñíscola, que ardió posiblemente por un problema eléctrico. Un ciclista que realizaba práctica deportiva por la Serra d’Irta divisó a las 10.25 horas desde el carrer d’Irta, cómo salía una intensa humareda de una vivienda situada a escasos 20 metros del camino, por lo que alertó al 112.
Al llegar allí vio como el fuego afectaba a la primera y tercera plantas de la vivienda situada en la calle Llimoners, número 10. En el exterior encuentra a la pareja de adultos y a uno de los niños. El otro hijo de la pareja había sido llevado minutos antes al colegio de la localidad. La mujer, que estaba embarazada y el hombre habían inhalado bastante humo y presentaban algunas quemaduras principalmente en manos y cara.
“Carlos se fue al colegio y su mujer se despertó por el humo y el fuego que nace en la habitación de los niños, pero fue todo muy rápido”, explica un amigo de la pareja. Tras el primer susto, los adultos fueron trasladados al Hospital para realizarles un chequeo y el hijo menor quedó al cuidado del vecino de forma temporal.
El aviso del fuego se produjo a las 10.30 horas y hasta el lugar se desplazó una dotación de bomberos del parque de Benicarló, con tres vehículos, cuatro bomberos, un cabo y un sargento, que ha extinguido las llamas. El incendio calcinó varias estancias de la vivienda, mientras que el resto de la vivienda se ha visto afectada por la alta temperatura y el humo.
Los bomberos estuvieron hasta cerca de mediodía ventilando la zona y estuvieron apoyados tanto por la policía como la Guardia Civil de la localidad. La urbanización Cap Blanc es un PAI a medio ejecutar y cuenta con problemas de servicios de toda clase y, a pesar que cuenta con los básicos, los vecinos han denunciado reiteradamente robos en materiales eléctricos comunes del PAI y demoras en el asfaltado de las vías públicas. A última hora de la jornada todos los miembros de la familia recibieron el alta y durmieron en la vivienda de unos amigos.