Los responsables de los ayuntamientos de Tortosa y Peñíscola se reunieron ayer para realizar el cambio, que se realiza cada dos años, en la presidencia del consorcio de la Ruta del Temple, integrado también por los municipios de Monzón, Lleida y Miravet.
Peñíscola entregó toda la documentación e informes a Tortosa para que continúe con la tarea de promoción de la ruta entre ciudades con monumentos templarios. Del encuentro y tras la última asamblea general de finales del mes de marzo, ha surgido la convicción de “dinamizar la ruta con la puesta en valor de sus atractivos en un esfuerzo de promoción conjunta” aseguraba el alcalde de Peñíscola, Andrés Martínez, que apuesta por incorporar a la ruta la dramatización o recreación del entorno histórico en el que se desarrolló la Orden del Temple “con el objetivo de ofertar al visitante una experiencia única y singular en un entorno históricamente privilegiado”.
A lo largo de este año el consorcio trabajará en esta línea, potenciando el uso de sus canales de comunicación on-line y la asistencia a ferias para promocionar la nueva apuesta de la Ruta del Temple.