En las inmediaciones se halla el poblado del Puig de la Nau. De confirmarse sería una rareza al no estar asentado sobre ninguna elevación
Los trabajos de construcción de la variante de la N-340 a su paso por el Maestrat han puesto de manifiesto la existencia de restos arqueológicos y lo que podría ser un nuevo poblado ibero cerca de la Fossa del Pastor, a unos dos kilómetros del poblado ibero del Puig de la Nau. Su origen sería el mismo, la cultura ibera que estuvo presente hasta la romanización de la Península. El informe arqueológico señala que se trataría del único poblado a pie llano, es decir a nivel del suelo y no ubicado sobre ninguna elevación, del país. Los restos fueron hallados por casualidad hace dos semanas durante la construcción de los canales de desagüe del vial. Los trabajos quedaron paralizados fruto del seguimiento arqueológico de la construcción de la obra y, en los últimos días han sido excavados y estudiados por profesionales arqueólogos.
Será necesario excavar fincas de las inmediaciones para conocer las dimensiones del mismo y si el vial que promueve el Ministerio de Fomento ha afectado su integridad.
En los últimos días los restos han sido ya destruidos y se ha ultimado el tramo de unos 50 metros de canalización de hormigón. También se paralizó la instalación de vallas quitamiedos en esta zona. El tramo afectado mostraba disposiciones de piedras de grandes dimensiones y otras de menor entidad. La empresa aseguró ayer que informará de los trabajos realizados con los hallazgos.
Los trabajos comenzaron en 2009 y han sufrido varios retrasos como consecuencia de los problemas de financiación de la obra por parte del Ministerio, lo que prolongó su finalización. El subdelegado del Gobierno en Castelló, David Barelles, fijó a finales del presente año 2015 el fin de los trabajos de ejecución de la variante de la N-340 que se desarrollan desde el año 2009. Barelles también señaló recientemente que, de los cerca de 50 millones de euros que supone la ejecución de la variante a su paso por los núcleos de Peñíscola, Benicarló y Vinaròs, “este año se invertirán 18 millones aproximadamente”.
Gran parte de los puentes e infraestructuras están ya ejecutados durante los 18 kilómetros de su trazado y han iniciado ya los trabajos de asfaltado y la reordenación del tráfico en la rotonda que enlaza la actual N-340 en el término de Peñíscola con el futuro trazado y los accesos a la AP-7. Paralelamente los ayuntamientos afectados han iniciado ya los procedimientos para reclamar la reversión del vial a su patrimonio municipal, a pesar del mal estado del firme en muchos puntos.
La plataforma en ejecución consiste en una calzada única con las estructuras preparadas para permitir su futura duplicación cuando el incremento de tráfico lo requiera. El trazado se ha diseñado para una velocidad de proyecto de 100 km/h. Las características de la sección tipo adoptada para el tronco de la futura infraestructura son las de una carretera convencional con calzada de 7 metros y arcenes de 2,50 m. Se han dispuesto un total de 5 enlaces.