La sanción que ha impuesto la Conselleria al Consistorio de Vinaròs por mantener un vertedero ilegal ha hecho replantearse el futuro de la cuestión a este municipio del litoral del Maestrat. Según desveló ayer el edil de Medio Ambiente, Agustí Guimerà, barajan ahora la posibilidad de instalar una planta de transferencia, reciclaje y tratamiento de los residuos que genera el municipio. Guimerà explicó que, en la planta se seleccionarían y reciclarían los residuos que pudieran reutilizarse, mientras que los restos orgánicos deberían trasladarse a otras plantas. “Si tenemos que pagar por el tratamiento de los residuos y su posterior traslado, lo normal es que podamos sacar unos beneficios. Y si tenemos que clasificar la basura, lo normal es que la clasifiquemos como corresponde”, abundó.
Este socialista se desmarcó de la tecnología que se pretende construir en Cervera y que muchos consistorios consideran ya técnicamente obsoleta y poco eficiente. “La propuesta de Geiserbox lanzada desde el Ayuntamiento de Benicarló era mucho más positiva y un avance”, aseguró. Sobre el cierre y sellado del vertedero al que obligó la Conselleria en el plazo de un mes el edil aseguró que “ya se está realizando, por parte del ayuntamiento, el proyecto para sellar la instalación”. Por otro lado negó que los residuos depositados en el vertedero estén afectando a los acuíferos de la zona y a la calidad del agua potable, que está siendo analizada periódicamente por la UTE Aigües de Vinaròs para garantizar su calidad.
Recientemente el portavoz socialista en Benicarló y diputado provincial, Enric Escuder, también ha abogado por trasladar formalmente la propuesta de geiser box como alternativa a las “obsoletas” infraestructuras de Cervera y rescatar la concesión ante la situación de caos y los incumplimientos de todos los plazos, algo que ha perjudicado gravemente la gestión de los residuos y podría acabar perjudicando el bolsillo del ciudadano. También Iniciativa reclamó ayer que se implantara el modelo benicarlando.