Las singulares características de Peñíscola y el peculiar cuidado que han tenido sus vecinos en conservar su esencia, han llamado la atención de la Universidad Politécnica de Valencia. Sesenta alumnos de tercer curso de arquitectura de la Universidad Politécnica de Valencia han visitado Peñíscola como ejemplo y caso práctico de arquitectura mediterránea. El fin de la visita ha sido conocer la ciudad, como ejemplo de mediterraneidad, dado que estos alumnos y profesores de tercer curso de la escuela de arquitectura, están trabajando sobre este tema. El profesorado había seleccionado Peñíscola, “como uno de los pocos enclaves de la Comunidad Valenciana donde las características de las construcciones típicamente mediterráneas se conservan y se preservan de forma ejemplar”, por lo que, la universidad ya ha solicitado a la ciudad que acoja, nuevamente, al inicio del próximo curso, nuevos grupos de estudiantes interesados en la clase práctica y visita a la ciudad, ya que la cifra de interesados podría superar el medio millar.
La visita se programó para todo el día y se iniciaba en el edificio sociocultural, con una presentación sobre la ciudad de la arquitecta y profesora de la Escuela de Arquitectura Pepa Balaguer, quien también es la encargada de redactar numerosos proyectos de rehabilitación de edificios singulares en la ciudad, así como de sus murallas. Tras la charla, los alumnos se desplazaron al Palacio de Congresos, edificio que ha recibido diversos premios por su singular concepción arquitectónica. La parte mas interesante de la visita fue el recorrido por el casco antiguo, en el que los alumnos universitarios visitaron las calles y edificios de mayor interés, las actuaciones realizadas en las fortificaciones y en algunos espacios urbanos, el “Museu de la Mar”, el castillo y el parque de artillería.
El alcalde de la ciudad, Andrés Martínez, acompañado por el edil de Urbanismo, Romualdo Forner, recibió al grupo de profesores y alumnos y les hacían entrega de cuatro ejemplares del Manual de Restauración del Casco Antiguo, recientemente editado, para las bibliotecas de la universidad, además de facilitarles información sobre el casco antiguo de la ciudad, a cada uno de los alumnos. Martínez se mostró muy agradecido a la universidad y recordó el esfuerzo de la administración local y demás administraciones públicas por preservar el patrimonio arquitectónico de la ciudad, “nuestro mayor tesoro y orgullo” aseguraba el primer edil.